Packaging sostenible para ecommerce

En la actualidad, la sostenibilidad es uno de los temas que preocupan a gran parte de la población. Por ello, cada  vez son más las empresas que se suman a iniciativas sostenibles y tratan de ser más respetuosas con el medio ambiente. Entre todas las acciones que pueden realizar las marcas, el packaging es un muy buen punto de partida. ¿Quieres saber más?

Aunque para hablar de packaging, podemos hablar de multitud de cosas (embalajes, bolsas, la caja en la que se vende el producto, las bolsas de la tienda…) en este artículo nos vamos a centrar en el packaging desde el punto de vista del envío de una compra en un ecommerce.

Para poder entender el motivo por el que es importante usar un packaging sostenible, primero tenemos que entender que el packaging es un factor más que acompaña al consumidor en su compra y, además, está hablando de quienes somos como marca.

Cuando un cliente realiza una compra no solo está comprando un producto, está viviendo una experiencia. Por ejemplo, si una persona acude a una tienda de ropa y compra una camisa, también ha vivido la visita a la tienda con todo lo que eso supone: iluminación,  música, ver cómo están colocados los productos, el orden, el cómo le han atendido, etc. Cuando sale de la tienda, no solo ha adquirido una camisa, sino que también habrá salido con una idea sobre la marca en función a lo experimentado allí; en la mente del consumidor se han ido asociando ideas entre lo vivido en la tienda y la marca en cuestión.

¿Cómo podemos recrear esto en digital? La respuesta es tan sencilla como compleja, pues hay multitud acciones y factores a tener en cuenta para lograrlo: el diseño de la web, la usabilidad, las fichas de producto, las imágenes, la presencia en redes sociales, la atención al cliente… y, por supuesto, el packaging. 

El packaging para envíos de ecommerce

En las compras online, el cómo un cliente recibe el producto en casa y el momento de abrirlo pueden ser clave para que una marca se diferencie de la competencia. Asimismo, es una buena herramienta para reafirmar los valores que defiende. No solo se trata de un medio para el transporte del producto, es también un elemento de comunicación, decorativo y de preservación del producto.

Ilustremos esto con un ejemplo: un cliente hace un pedido a un ecommerce de cosmética natural que dice ser ecofriendly y vegano. El pedido que le llega a casa está embalado en una bolsa de plástico de la empresa de transportes y, además, el producto está dentro de otra bolsa de plástico genérica que contiene la caja (envuelta en papel de burbujas) donde encontramos el bote de plástico final del producto cosmético que ha comprado. Abrir ese paquete será aburrido y, además, se está usando demasiado plástico, por lo que no está siendo nada coherente con el mensaje inicial de la marca de ser ecofriendly. Por el contrario, si al hacer el mismo pedido, el cliente recibe en su casa una caja de cartón reciclado con el logo de la marca y, al abrirla, encuentra el producto bien presentado, envuelto en papel de nido de abeja, con una tarjeta de papel dónde da las gracias por la compra o explica algo sobre el producto y, además, no incluye embalajes de plásticos de un solo uso, el mensaje que le está llegando a ese cliente es bien distinto al del primer escenario. 

Es decir, el packaging tiene un impacto sobre la mente del consumidor y tiene que ir acorde con los valores de la marca. Sin duda, la palabra clave es la coherencia entre la comunicación y los hechos, para poder posicionar el mensaje de manera correcta en la mente del consumidor.

Conseguir que la persona que reciba el envío viva una momento agradable al abrir el paquete, se sienta especial y cuidado por la empresa será otra de las claves para marcar la diferencia. Además, no podemos pasar por alto que las marcas conviven con las redes sociales y, en cuanto a pedidos online se refiere, el unboxing es unos de los contenidos estrella de Internet. Cuanto más cuidados estén los envíos, mejor será la respuesta que obtengamos.

Aunque no hablamos solo del momento unboxing en cuanto a ser grabado y mostrado en redes, si no de la experiencia en sí de abrir el paquete, de ver que todo está perfectamente empaquetado y cuidado. La clave es hacer sentir especial a la persona que está abriendo el paquete y comunicar los valores de la marca a través de dicha experiencia.

En definitiva, crear este tipo de unión entre la comunicación y el packaging se basa en ser coherentes. Elegir materiales y complementos para el packaging que sean ecofriendly mostrará a los clientes que la marca está comprometida con la causa. Por ejemplo, el envío puede incluir una tarjeta personalizan en la que se expliquen las características sostenibles del embalaje y, a través del storytelling, contar que el producto está envuelto en papel de nido de abeja, o que las "corcho" con el que se ha protegido el producto es en realidad un material biodegradable a base de fécula de patata y que se disuelve al contacto con el agua. La experiencia de unboxing que se crea gira en torno al eje de la sostenibilidad y ese mensaje está calando en la mente del consumidor.

Beneficios del packaging sostenible

Estamos ante una nueva generación de consumidores para los que es importante consumir de forma más responsable y con mayor conciencia ecológica, por lo que ponen especial atención en que las marcas en las que compran compartan esos valores y hagan lo que esté en su mano para ser más respetuosas. 

Un estudio realizado por Aecoc Shopperview, revela que el 30% de los consumidores está dispuesto a pagar más en sus compras online si con eso el packaging es más sostenible; lo que reafirma la importancia de elegir bien los materiales de los embalajes por parte de las empresas. 

Esto demuestra que usar alternativas más sostenibles, no solo es una manera de ser respetuosos con el medio ambiente como marcas, sino que, además, estará añadiendo un valor añadido al producto de cara al consumidor que comparta estos valores con la marca.  

Por un lado, la marca estará reduciendo la huella de carbono gracias al uso de embalajes ecológicos que han contaminado menos al fabricarse y que, normalmente, necesitan de menos recursos energéticos.

Por otro lado, la marca estará aportando un valor añadido y emocional al consumidor. Como comentábamos, los clientes se sienten más positivos cuando una empresa aboga por la sostenibilidad. Esto se debe a que comparten los mismo valores y comprar en una marca que apuesta por alternativas más sostenibles, les hace sentir partícipes en la labor por respetar el medio ambiente. 

Un estudio realizado por Packlink indica que en España un 46% de las empresas que cuenta con un ecommerce han cambiado su tipo de embalaje por alternativas más respetuosas para reducir la huella de carbono, siendo uno de los países europeos con mayor conciencia medioambiental.

Asimismo, es importante para las empresas considerar el uso de un tipo de envases y embalajes más sostenibles pues forma parte de la agenda 2030, donde se plantea que todos los envases sean reutilizables y reutilizables. El objetivo que se marca la ONU es el de eliminar los plásticos y sustituirlos por materiales biodegradables. 

Materiales para un Packaging Sostenible

Entonces, ¿qué opciones tienen las empresas para llevarlo a cabo? En primer lugar, necesitamos entender que es el packaging sostenible. Lo definimos como el tipo de packaging que satisface las necesidades de la empresa y que, a su vez, reduce su impacto medioambiental comparado con otras alternativas más contaminantes. 

Hay que buscar el equilibrio entre ser sostenibles, asegurar que el embalaje protege el producto durante el envío y, además, cumple con los objetivos (diseño, storytelling, marketing, presupuesto, etc.) que la empresa se haya marcado en cuanto al packaging. 

Aunque no existe un embalaje que genere cero residuos, las empresas pueden elegir entre distintas opciones que reduzcan el impacto medioambiental. Para conseguirlo, las marca tiene a sus disposición multitud de opciones pero, en lo que a packaging se refiere encuentran diversas oportunidades:

• Cartón y Papel: 

• • Material biodegradable: son materiales que se descomponen en poco tiempo de manera natural al ser expuestos a la luz, aire, microorganismos, etc. Además, no debe de contener tintas tóxicas, ni pegamentos. 

  • Materiales compostables: este tipo de packaging está hecho con materiales 100% naturales (semillas, frutos secos…) por lo que se convierte en compost y se descomponen con facilidad.

  • Papel y cartón FSC 100%: este tipo de material procede de bosques gestionados de forma responsable. Su uso aporta beneficios ambientales, sociales y económicos y respeta la conservación de los bosques. 

  • Materiales reciclados: se trata de un material creado a base de papel ya existente y se ha transformado en un nuevo producto. Por ejemplo, el cartón corrugado reciclado es de los más usados en los ecommerce para las cajas de los envíos, pues es resistente y ligero.

• Plásticos:

• • Bioplásticos: este tipo de packaging usa plásticos creados a base de algas, fécula de patata, hongos, almidón de maíz, etc. Es decir, la materia prima no es el petróleo y sus derivados, por lo que se convierten en plásticos biodegradables, compostables y reciclables pues proceden de sustancias biológicas.

  • Evitar plástico de un solo uso: si es necesario usar plásticos, es mejor decantarse por plásticos reciclados y que no sean de un solo uso.

No obstante, tenemos que tener en cuenta que aunque un material sea reciclado no necesariamente es sostenible. Por ejemplo, si para fabricar un material hecho a base de plantas se han talado bosques o una empresa compra packaging reciclado pero está impreso con tintas contaminantes o viene de muy lejos y contamina el transporte, no sería sostenible. En definitiva, son muchas las variables a tener en cuenta, estás son algunas recomendaciones:

• Consumo de proximidad: el consumo de cercanía reducirá la huella de carbono y se potencia el comercio local. 
  
  
• Menos es más: usar solo los embalajes necesarios, hará que sea mucho más sostenible. 
  
  
• Diseños que permitan ser reutilizados: que el packaging pueda tener más de una vida ayudará a reducir el consumo. Por ejemplo, que la caja del producto esté diseñada para poder usarse como almacenaje.
  
  
• Usar tintas al agua: no contienen aditivos químicos y, por lo tanto, no contaminan.
  
  
• Mínimos residuos: como comentábamos, es muy difícil generar 0 residuos, pero estos pueden ser reciclados para usarse de nuevo con materias primas, siendo parte de la economía circular.  

Como podemos ver, hay multitud de opciones para hacer que el packaging sea más sostenible y esté acorde a los valores que defiende la marca. Poco a poco, las empresas están viendo el potencial social que estos cambios aportan y se van sumando a la causa.

Por ejemplo, la empresa de cosmética Lush es conocida por ser ecofriendly y, en cuanto a packaging, reducen el uso de plásticos al máximo mediante el envío sus productos "desnudos", protegidos por separados de cartón y para evitar los impactos durante el transporte, rellenan los espacios Eco Flo, un material biodegradable que se deshace con el agua.  

Otro ejemplo podría ser la empresa catalana Freshly Cosmetics. Son una marca de cosmética sostenible y declaran tener un compromiso con el medio ambiente. No solo se ve reflejado en sus productos, sino que en sus envíos usan una caja de kraft reciclado que, además, también es reciclable, participando dentro de la economía circular.  

Por último vamos a mencionar a otra marca que, a priori, no asociamos con productos de sostenibilidad como es El Corte Inglés. En mayo de 2022 se publicaba una nota de prensa donde indican apostar por la sostenibilidad a través del packaging sostenible. En concreto, sobre los envíos indica que usan cajas de cartón reciclado y material de protección (papel de burbujas) y bolsas hechas de plástico reciclado.  

En definitiva, el ser responsables con el medio ambiente es una de las preocupaciones que está más al día, tanto de empresas como consumidores. En concreto, el sector del ecommerce tiene una gran oportunidad en cuanto a los diseños del packaging de los envíos. En Rumpelstinski podemos ayudarte a diseñar un packaging que represente a tu marca y elegir los materiales sostenibles que mejor se adapten a tus necesidades.