Las redes sociales llegaron para cambiar y (r)evolucionar el sector del marketing y la publicidad, creando nuevos perfiles laborales que, hasta el momento, no existían. Community Managers, Social Ads Manager, Instagramers, Tiktokers, Streamers, Youtubers… son algunas de las profesiones que han ido apareciendo en los últimos años relacionadas con las redes sociales.
Si echamos la vista atrás y pensamos en cómo era el mundo del marketing y la publicidad hace 30 o 40 años, lo más probable es que nadie se imaginase cómo evolucionaría la industria gracias a las redes sociales. De hecho, no tenemos que irnos tan lejos, solo tenemos que pensar en esas personas que empezaron subiendo videos a Youtube hace 10 o 15 años y que ahora son grandes celebridades. Si les preguntamos, nos dirán que jamás pensaron que subir vídeos a Internet por diversión se podría convertir en un trabajo. Y no cualquier trabajo, las cifras que se mueven en el sector pueden llegar a ser millonarias.
El término general con el que podemos englobar a todos estos perfiles es el de creadores de contenido. Como creadores, su trabajo consiste en generar contenido en redes sociales con algún fin concreto, ya sea con un fin lúdico, divulgativo o comercial (publicidad).
Estamos hablando de una profesión que, como cualquier otro trabajo, conlleva una remuneración económica. Pero ¿cómo se genera dinero en redes sociales? La respuesta fácil es a través de las colaboraciones con marcas, pero no es la única manera.
Hay varias formas de monetizar las redes sociales y cada vez surgen nuevas oportunidades para los creadores de ver recompensado su trabajo. Para poder hablar sobre ello, vamos a centrarnos en Instagram y TikTok principalmente, aunque también sería replicable en otras plataformas como Twitch, Youtube, Twitter… Sin olvidarnos de Linkedin, plataforma a la que dedicamos un post hace unas semanas hablando sobre los influencers que existen en esta red social.
Las comunidades de los creadores de contenido son el público objetivo al que las marcas quieren llegar con las colaboraciones, por lo que el primer paso es hacer el “match” entre la marca y el creador: ambos tienen que tener valores parecidos para que la colaboración sea coherente. Por ejemplo, si se trata de un perfil de comida sana, no es coherente hacer una colaboración con una marca de bollería industrial; los seguidores de este perfil no están interesados en el producto por lo que a la marca no le reporta ningún beneficio y, además, el influencer está perdiendo credibilidad.
A la hora de buscar campañas, los creadores de contenido no tienen por qué esperar a que las marcas les contacten. Pueden escribirles directamente con una propuesta o usar alguna de las plataformas que hay destinadas para poner en contacto a marcas con influencers. Una vez están en contacto, habrá que negociar los términos y condiciones de la colaboración, donde se define que se va a hacer, los formatos, los mensajes, los objetivos, el pago… etc.
Para recibir una remuneración a cambio de la colaboración encontramos distintas modalidades de hacerlo. Dependerá del objetivo de la colaboración, el número de seguidores y las métricas del influencer, así como del presupuesto que la marca tenga para dicha acción:
Otra forma de monetizar las redes sociales es a través de las propias plataformas y las distintas herramientas que ofrecen. Dependiendo de la red social, encontraremos unas opciones u otras:
En Instagram están empezando a introducir las insignias entres los perfiles con cuenta de empresa. Son una forma de que los seguidores puedan apoyar a los creadores de contenido en los directos. Si se compra una insignia durante un vídeo en directo, aparecerá un icono de corazón junto al nombre de usuario en los comentarios y dan ciertas ventajas como, por ejemplo, destacar las preguntas que se hagan para que el creador las vea sobre otras.
De igual manera ocurre con TikTok o Twitch, donde los espectadores de los directos pueden hacer donaciones o mandar “regalos” y emojis a los creadores, con el saldo que previamente han cargado en su cuenta, además de otras ventajas como hemos mencionado anteriormente. De este modo, los seguidores pueden apoyar a los creadores, pues parte del dinero de estas donaciones o regalos, le llega al creador.
Para poder vivir de las redes, es interesante tener una estrategia de ingresos diversificada para optimizar al máximo los esfuerzos que se hacen al crear contenido. Es recomendable utilizar varias de las opciones que ya hemos explicado.
No obstante, existen más formas de utilizar las redes como fuente de ingresos. A continuación vamos a detallar otras maneras de hacerlo, así como mencionar otras que están empezando a implementarse o están en periodo de pruebas:
Como todo, poder monetizar las redes sociales y obtener beneficios es un proceso que lleva tiempo (por muy rápido que se crezca en TikTok), y necesita ir acompañado de una buena estrategia, con unos objetivos claros y bien definidos. Además, los beneficios que se pueden obtener variarán mucho en función al nicho de mercado, el número de seguidores, la plataforma y las métricas.
Esperamos que el artículo te haya resultado útil para tener una visión más amplia sobre la monetización de las redes sociales. En Rumpelstinski podemos ayudarte a optimizar tu estrategia en redes para conseguir el máximo beneficio. ¿Hablamos?